¡Horror! Me falta un ingrediente…

Hoy en día, corremos tanto para hacerlo todo que ocurre a menudo que, en plena faena culinaria, nos damos cuenta de que nos faltan uno o varios ingredientes de la receta.Que no cunda el pánico, te proponemos unas cuantas soluciones para salir del paso con algunos de los ingredientes más comunes.

• - Si te has quedado con chocolate de cobertura y necesitáis coronar vuestra tarta, mezclad una cucharada de mantequilla derretida por cada tres de cacao en polvo.
• - Si el brick de nata líquida que debería estar en la nevera no está, sustitúyela por la misma cantidad de leche (a ser posible entera) más un trozo de mantequilla derretida.
• - Si tienes menos mantequilla de la que creíais, el truco es dejar la que tienes a temperatura ambiente y añadirle leche también a temperatura ambiente. Bátela bien durante unos minutos para homogeneizar la mezcla y te quedará esponjosa y lista para usar.
• - Una cucharada de zumo de limón puede cambiarse por media de vinagre blanco. De la misma forma, el vino y el vermut son intercambiables.
• - A la hora de rebozar, si no tienes pan rallado atrévete a usar copos de puré de patata.
• - ¿No tienes chalotas? Usa cebolla y añádele un diente de ajo.